Generalmente, este tratamiento se realiza en niños de entre seis y once años de edad ya que es en la etapa de crecimiento donde los huesos maxilares todavía se están desarrollando y son, por ello, “moldeables”.
Además es el periodo de recambio dentario que se conoce con el nombre de dentición mixta, época en la que los dientes de leche conviven con los permanentes, donde podremos guiar la erupción de los dientes permanentes hacia una posición correcta

Es muy importante tener una primera consulta con el ortodoncista alrededor de los 6 años de edad, donde se podrá identificar si existe un desequilibrio en el desarrollo de los maxilares y si es necesario guiar el crecimiento con aparatos de ortopedia funcional.

El hecho de llevar un tratamiento de Ortodoncia interceptiva en la infancia no quita que sea necesario un tratamiento de ortodoncia convencional cuando finalice la etapa de crecimiento pero, sin lugar a dudas, hace que el posterior tratamiento sea mucho más rápido y sencillo.

Sin embargo, el hecho de no usar esta ortodoncia de niño, puede hacer que nos encontremos con maloclusiones severas en la adultez ocasionada por un crecimiento anormal o desequilibrado de los maxilares que ya no podrán ser resueltos sólo con ortodoncia convencional y será necesario recurrir a otros procedimientos como extracciones dentarias y tratamientos de ortodoncia fija mas largos y complejos e incluso cirugía ortognática.